Tragaluz: culto gastronómico y celebración de los sentidos

Los sentidos se despiertan. Los sabores y los aromas se encuentran en una danza sagrada que eleva el placer de comer. Tragaluz es el escenario donde la transformación culinaria ocurre, y esta temporada lo demuestra con una nueva carta que desborda innovación, creatividad y la autenticidad de los insumos peruanos.

Con Ricardo Ehni al mando de la cocina, el talentoso chef despliega toda su sensibilidad y maestría para combinar lo mejor del Perú con influencias de distintas cocinas del mundo.
“El nuevo menú de Tragaluz celebra la diversidad cultural de Lima con una propuesta sofisticada que une tradiciones globales y técnicas contemporáneas”, comenta Ehni. Así, mar, tierra y selva se fusionan en platos que son verdaderas obras de arte.

Sabores que inspiran

La experiencia puede comenzar con un Tataki Angus, de esencia asiática, acompañado con cítricos de la selva y ollucos crocantes, o con el Anticucho Pulporco, una poderosa combinación de panceta confitada, pulpo y salsa de ajíes fermentados.

La llegada del verano se celebra con el Ceviche Ahumado, elaborado con pesca del día, zarandaja, tortita de choclo y ají amarillo, en una propuesta que rinde homenaje a los sabores del norte. También destacan las Conchitas de Paracas con espuma de parmesano y caviar de trucha, una muestra del dominio del mar en su máxima expresión.

Por supuesto, en esta carta permanecen los clásicos que han marcado la historia de Tragaluz, como el arroz con pato, el saltado Tragaluz y el tiradito nikkei. Platos que, tras 15 años de trayectoria, se han convertido en parte de su esencia.

Cocina con propósito

Más allá del sabor, Tragaluz mantiene un firme compromiso con la sostenibilidad y el respeto por el entorno.
“Trabajamos con productos de origen responsable. Muchos de nuestros insumos —pescados, carnes, frutas, verduras, huevos de corral y lácteos— provienen de productores locales”, detalla el chef.

Asimismo, el restaurante apuesta por cafés y tés con certificación ecológica y provenientes de asociaciones de comercio justo, reafirmando su visión de una gastronomía consciente, responsable y profundamente conectada con su entorno.

Tragaluz es, en esencia, un homenaje a la experiencia sensorial. Un espacio donde cada plato invita a detenerse, disfrutar y celebrar la vida con sabor.

Dirección: Malecón de la Reserva 1035, Miraflores
Instagram: @tragaluzperu

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