María Plevisani nos invita a descubrir su exquisita receta de pasta al limón. Sumérgete en este delicioso y creativo plato junto a la talentosa y joven chef, y déjate seducir por la perfecta armonía de sabores que ella ha perfeccionado con pasión y dedicación.
¡Hola, Revista C! Hoy tengo el placer de compartir con ustedes una de mis recetas favoritas. Amo el limón y la pasta, y esta mezcla es simplemente espectacular. He probado muchas versiones y leído sobre diferentes variaciones de esta pasta. Es la favorita de mi hermana Valentina, quien la prepara de maravilla. Sin embargo, para hoy me inspiré en una combinación de mis recetas favoritas de pasta al limón, incluyendo la de mi hermana Vale, Angelini Osteria en Los Ángeles y Lil Frankies en Nueva York.
¡Espero que les guste! Normalmente, la preparo sin crema de leche, pero hoy decidí darle un toque más cremoso.
Ingredientes:
- 400 gramos de Spaghetti o Tagliolini
- 1 limón amarillo (para rallar y exprimir)
- 1 taza de parmesano rallado (preferiblemente Parmigiano Reggiano o Grana Padano) y un poco más adicional para servir
- 2/3 cucharadas de mantequilla
- ¼ taza del agua de la pasta
- Sal al gusto
- Pimienta al gusto
- ¼ taza de crema de leche (opcional)
- Peperoncino al gusto (opcional)
- ~8/9 hojas de albahaca (opcional)
Pasos:
- Pon a hervir una olla con agua, llenándola hasta las tres cuartas partes. Asegúrate de usar una olla lo suficientemente grande para que quepa la pasta.
- Una vez que la pasta termine de hervir, no tires el agua de la pasta. Esto es clave en esta técnica. Emulsionarás la mantequilla, el parmesano y el agua de la pasta junto con la ralladura y el jugo de limón hasta alcanzar la consistencia adecuada.
- En una sartén aparte, derrite la mantequilla y ralla el limón entero encima hasta que se derrita a fuego medio-bajo.
- Agrega las hojas de albahaca para que agarren sabor junto con el limón y retíralas después de unos minutos cuando la mezcla haya absorbido el sabor.
- Añade el jugo de medio limón junto con la crema de leche (opcional) y baja a fuego lento.
- Cuando la pasta esté al dente (esto es clave porque continúa cocinándose en la salsa, recomiendo 2-3 minutos menos que las instrucciones del paquete), colócala directamente en la sartén, sube el fuego y vierte un poco del agua de la pasta.
- Mezcla bien y agrega la otra mitad del jugo de limón y la mitad del parmesano rallado. Revuelve para emulsionar y añade más agua de la pasta según sea necesario para lograr una salsa más fina de lo que crees.
- Sirve la pasta con más parmesano por encima, peperoncino si quieres un toque picante, más hojas de albahaca y pimienta negra recién molida si la tienes.
- ¡Ahora podrás sentirte como en un restaurante, pero en casa! Ten cuidado porque querrás comer esto todos los días.
Esta receta es una verdadera delicia que combina la frescura del limón con la suavidad de la pasta, creando un plato que seguramente se convertirá en uno de tus favoritos. ¡Disfrútalo!
